12 de enero de 2018

Dicotomía

Tengo tanto y a la vez nada para decir.
No pensé, literalmente no lo pensé, pero ya había tomado la decisión y las consecuencias de ella, pero no es algo que me sienta arrepentida. Simplemente no tengo respuesta lógica ni por la cabeza ni por el corazón. 
No es algo que haya imaginado o pensado en ninguna forma antes, ni si quiera que se cruzara por mi mente,  pero allí estaba, contigo. Desnudando el alma. Diciéndote lo que soy, la dicotomia en la que me encontraba en ese momento; tenía que hacerlo, la situación lo ameritaba. Nunca me había pasado con nadie, excepto contigo, talvez deuda propia de la sinceridad que habías tenido conmigo.
Aún así era demasiada tranquilidad bajo las circunstancias, tranquilidad que no podía explicar, dónde estaban esas mariposas, el éxtasis, los nervios...?

Quizás mi amigo tenía razón, todo fue producto del miedo, una falsa tranquilidad.
No lo sé,  intento darle vueltas en mi cabeza y no hay respuesta, nada.
Fue algo loco, un momento único para mi, nuevo, tierno.
Disfruté a mi manera de todo aquello, pero hubiesen sido ideal esas mariposas de antaño...  Porqué la diferencia? será mi única interrogante.
No te quiero de maestro,
No es lo que busco, ni anhelo para mí.
Mueve tú las piezas... teniendo eso claro, todo lo demás deberá esclarecerse para mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario